Redacción – Pasión X El Deporte | 22 de octubre 2025
A pesar de haber iniciado la temporada 25-26 de la LVBP con un balance de 3-3, los Cardenales de Lara han estado operando sin la presencia de su capitán e impulsor ofensivo. La espera ha terminado: Ildemaro Vargas, el popular “Caripito”, ha confirmado la fecha para su tan esperado debut con el equipo crepuscular, marcando un punto de inflexión en la aspiración del club por revalidar el título.
El regreso de Vargas al uniforme de los “pájaros rojos” está pautado para el próximo jueves 30 de octubre. El manager podrá contar con su líder cuando el equipo reciba a los Tigres de Aragua en el Antonio Herrera Gutiérrez de Barquisimeto, siendo este el único compromiso que Cardenales disputará en condición de local durante la próxima semana.
Una Trayectoria Consolidada y un Regreso Triunfal
Cuando el infielder salte al terreno de juego, dará inicio oficialmente a su duodécima campaña en la pelota profesional venezolana y la décima vistiendo la camiseta de Cardenales (aunque sin ser consecutivas). Vargas debutó en 2012 con Caribes de Anzoátegui, jugando con ellos hasta 2013, y desde entonces solo se ausentó de las temporadas 2014 y 2019 de la LVBP.
El capitán regresa al nido luego de haber sido la pieza clave en la consecución del campeonato anterior, donde fue nombrado MVP de la final. En esa serie decisiva, su rendimiento fue extraordinario, registrando un promedio de .556, con 15 imparables, ocho anotadas, dos cuadrangulares, un OBP de .600 y un OPS de .815.
Tras la conquista criolla, Vargas se enfocó en el béisbol de las Grandes Ligas con los Cascabeles de Arizona. A pesar de haber participado en 38 juegos con el equipo principal, conectando 31 hits en 115 turnos para un promedio de .270, su temporada en Estados Unidos se vio afectada. El veterano pasó tiempo en Triple-A con Reno, donde bateó .255 en 54 juegos, y sufrió una fractura en el quinto metatarso del pie derecho, lo que limitó su participación.
El camarero iniciará su duodécima temporada en la LVBP con impresionantes números vitalicios: acumula 465 incogibles en 1.502 turnos, lo que le otorga un promedio de por vida de .309 en 399 partidos disputados. Su llegada promete ser el catalizador ofensivo que el Cardenales necesita para estabilizar su juego y emprender el camino hacia el bicampeonato.
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