El agujero negro de Chicago: ¿Quién sustituirá a Kyle Tucker? Los Cubs enfrentan un dilema ofensivo de 400 millones de dólares

Redacción – Pasión X El Deporte | 21 de noviembre 2025

Durante la temporada 2025, la ofensiva de los Cachorros de Chicago fue la columna vertebral del equipo, llevando el peso de las victorias en múltiples ocasiones. La llegada de Kyle Tucker, la adquisición más resonante del invierno pasado, junto con la explosión de Michael Busch y el sorprendente desempeño de Pete Crow-Armstrong en la primera mitad, generaron una alineación envidiada por gran parte de las Grandes Ligas.

Sin embargo, la producción ofensiva cayó en picada durante la segunda mitad de la campaña, un factor que contribuyó directamente a la eliminación del equipo en la segunda ronda de los playoffs de la Liga Nacional. Por ello, Chicago se enfrenta al receso invernal con más interrogantes que certezas, siendo la más apremiante: ¿Cómo se reemplaza el bate de Tucker?

La Despedida de una Estrella y sus Números de Élite

Kyle Tucker, el jardinero derecho de 28 años, es la pieza más codiciada en la agencia libre de este invierno y se proyecta que su contrato se acercará o incluso superará los 400 millones de dólares. Aunque la directiva de los Cubs ha manifestado su interés en retenerlo, la creencia generalizada en la industria es que el equipo no tiene la intención real de asumir ese compromiso financiero.

A pesar de lidiar con una distensión en la pantorrilla y una microfractura en la mano derecha que mermaron su rendimiento en la segunda mitad y la postemporada, Tucker demostró ser un jugador de élite cuando estuvo sano. Su primera mitad de temporada fue la que provocará el deseo de los postores, dejando una línea ofensiva de .280/.384/.499, con 17 jonrones y una defensa digna de Guante de Oro en el jardín derecho.

Kyle Tucker: Balance 2025 (Cachorros de Chicago)
Turnos al Bate (AB) AVG HR SB OPS RBI BB
500 .266 22 25 0.841 73 87

Prioridades de Hoyer y la Incógnita de Crow-Armstrong

El presidente de operaciones de béisbol de los Cubs, Jed Hoyer, minimizó la urgencia de una adquisición ofensiva masiva. En la Reunión de Gerentes Generales, Hoyer declaró que el foco principal estará en el pitcheo:

“Siempre buscaremos mejorar la ofensiva, pero no es imperativo. Creo que tenemos un grupo de jugadores de posición realmente bueno. Si consideramos la ofensiva y la parte defensiva, creo que es un grupo muy productivo. […] Si miras nuestro organigrama, necesitamos añadir pitcheo en este receso, y ese será probablemente el mayor foco.”

A pesar del desplome colectivo, los Cubs finalizaron la temporada quintos en carreras anotadas en toda la MLB. Sin embargo, si bien el surgimiento de Busch genera optimismo, la caída en el rendimiento de Pete Crow-Armstrong (‘PCA’) en la segunda mitad es una bandera roja. PCA, uno de los jugadores más electrizantes del béisbol con defensa élite, registró un OPS de .634 en la segunda mitad. A sus 23 años, Hoyer confía en su desarrollo, comparándolo con Javy Báez, cuya defensa le permitió seguir en la alineación mientras refinaba su ofensiva.

Los Candidatos en el Mercado y la Resistencia a Pagar

Si los Cubs decidieran buscar un refuerzo ofensivo, dos nombres de alto perfil en la agencia libre podrían suplir la producción de Tucker: el jardinero y ex Cub, Kyle Schwarber (tercer lugar en el MVP de la NL 2025), y el tercera base Alex Bregman, a quien Chicago ya intentó firmar el invierno pasado.

Si bien los aficionados sueñan con el retorno de Schwarber, el perfil del bate diestro de Bregman podría encajar mejor. El tercera base de 31 años, All-Star con los Medias Rojas en Boston, bateó .273 con 18 jonrones y 62 impulsadas en 2025.

La pregunta de fondo, recurrente para Chicago en años recientes, es: ¿están dispuestos a pagar? La historia reciente sugiere que el club es más propenso a invertir grandes sumas en abridores de primera línea y brazos de alto rendimiento en el bullpen que en refuerzos ofensivos. Aunque un equipo de un mercado tan grande como Chicago debería tener la capacidad de abordar múltiples necesidades, no sumar refuerzos de impacto en la ofensiva, a pesar de la prioridad en el pitcheo, podría ser un error costoso si la inestabilidad de la segunda mitad se repite.

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